La vuelta de Franco Colapinto a la Fórmula 1 no está siendo como se esperaba. Sus resultados están vinculados a decisiones desfavorables tomadas por Alpine, la escudería francesa para la que compite, lo que hace incierto su futuro en la temporada actual.
Alpine se encuentra en el último lugar del Campeonato Mundial de Constructores, marcando uno de los peores inicios en la historia del equipo. Las razones son múltiples: decisiones logísticas, técnicas y estratégicas inadecuadas que han afectado el rendimiento de los monoplazas.
Un inicio complicado para Colapinto
Las malas decisiones se han acumulado, incluyendo la elección de asignar un lugar como piloto titular al novato Jack Doohan, un australiano de 22 años sin experiencia previa en la Fórmula 1. La presión sobre él fue inmensa, dado que su contrato solo garantizaba cinco carreras, y sus resultados fueron inferiores a las expectativas, llevando a su despido tras seis Grandes Premios.
Impacto de Doohan en el rendimiento de Alpine
La gestión de Doohan comprometió el futuro de Alpine debido a los costos derivados de sus accidentes. Estos incidentes no solo agotaron gran parte del presupuesto del equipo, sino que también afectaron la capacidad de Alpine para mejorar y reacondicionar el auto según lo estipulado por el reglamento de la Fórmula 1.
Durante su breve tiempo en el equipo, Doohan utilizó múltiples componentes esenciales, incluyendo unidades de combustión interna y baterías, lo que generó un desgaste significativo de recursos. Esto dejó a Franco Colapinto heredando un auto en condiciones desfavorables para competir.
Consecuencias en la dirección del equipo
Las decisiones erróneas también llevaron a la renuncia de Oliver Oakes, el director del equipo, dejando a Alpine sin liderazgo justo al inicio de la temporada. Actualmente, Dave Greenwood asume temporalmente como representante ante la FIA, pero la influencia de Flavio Briatore, asesor ejecutivo, es notable en el equipo.
Franco Colapinto busca adaptarse
En los tres Grandes Premios disputados hasta ahora, Colapinto ha tenido el potencial para lograr más, pero las limitaciones de su auto se lo han impedido. Tras la última carrera en España, su ingeniero de carrera, Stuart Barlow, le ofreció disculpas por las condiciones del vehículo, destacando que ambos aún están en proceso de conocerse y trabajar juntos.
Para que Alpine pueda revertir su situación, es crucial que aborden sus problemas en todos los niveles, desde los aspectos mecánicos y técnicos, hasta la necesidad de un liderazgo fuerte que pueda guiar al equipo hacia una mejoría significativa.
